¿Qué hago con el Bolg?

Momento de decisión

Este blog me ha dado muchas satisfacciones.
A través de él me empecé a comunicar "cara a cara" con muchos de ustedes.
Y a través de él he recibido infinidad de mensajes.
Algunos constructivos, otros no tanto.
Pero el disenso es la base del periodismo de participación.
A partir de esa premisa quisiera contestar brevemente a algunos de ellos: A Ignacio de Barracas le quiero contestar que si tiene alguna duda sobre mi que le pregunte a su hermana, ella me conoce bien... A Carlos de Caballito: "gracias... y te deseo lo mismo para vos". Y a Eduardo de Palermo le quiero responder que quizás sea cierto lo que dice, ya que mi mamá me contó que conoce a la suya... del trabajo.
Ahora estoy pensando que voy a hacer con esta blog...
Este fin de semana lo voy a consultar con los amigos Eduardo Van de Koya, Joaquín Morales: ¡Soltá! y Julio Gramos.
Pero la opinión definitoria la espero de alguien que sabe mucho de computación, mi amigo (y columnista de mi programa de radio) Marcelo Otaegui.
Veremos que pasa.
Lo estoy reflexionando.
Y cualquier novedad, buena o mala, ustedes serán los primeros en conocerla.

Análisis Internacional

Futuro

Lula, Chavez y Kirchener se juntaron en Uruguay. Comieron frugalmente en el Hotel Tacauarembó. Pidieron perdices Pot-Pot con timbal de arroz, ensalada verde con amapola, y para terminar el tradicional Postre Chajá. Todo regado con abundante agua mineral sin gas y un "toque" vino Tannat.
Kirchner se salpicó la corbata azul con salsa y Alberto Fernandez -solícito- se la limpió con su pañuelo. En el otro extremo de la mesa, dicen que vieron a Chavez un poco constipado.
Para distender, después del café (ver foto) jugaron al piedra, papel o tijera.
Cada vez resulta más claro: soplan vientos de cambio en las relaciones entre los paises del Mercosur.

Drexler y el Oscar

Oscar Goldman

Jorge Drexler estuvo magnífico en la entrega de los Oscars. Porque se bancó que su tema lo cante Antonio Banderas y, además, cuando subió a agradecer “la descosió”. En mi carrera tuve la suerte de ganar muchos premios. Me acuerdo que cuando gané el premio de la Fundación Contra el Cáncer de Mamas, los organizadores querían que suba a agradecerlo el gordo García Blanco de Dia D. Me opuse terminantemente, ustedes saben el encono que mantengo con el gordo. Entonces se lo dieron directamente al él y además le regalaron una TV 66 pulgadas pantalla plana y DVD. No me quejo: es el precio que tuve que pagar por mantener mis convicciones.