lunes, febrero 21, 2005

¡Buena Manu!

No todas son malas noticias. El sábado por la noche prendí la tele y Manu Ginóbili llenó la pantalla. El bahiense estaba jugando el Juego de las Estrellas de la NBA. Un argentino había llegado a lo más alto del basket mundial. Un argentino como vos o como yo o un poco más alto. Un argentino que con dedicación y esfuerzo ganó con una magnífica "volcada" ese juego loco que es la vida.